Cómo curvar madera: las mejores técnicas para obtener tableros curvos
El mecanizado de materiales es un arte que el ser humano ha practicado desde que inventó las primeras herramientas. En algún punto de la historia, lo hicimos con el metal, creando espadas, hasta llegar a la piedra y la creación de casas. Hoy en día, contamos con todo tipo de tecnologías, que facilitan tratar los materiales y modificarlos a nuestro antojo. En este artículo, te mostraremos el proceso necesario para doblar madera.
Doblar madera es un proceso que se ha estandarizado con el tiempo. Al principio, conseguir los dobleces necesarios para tratar la madera era posible solamente con unos pocos tipos. Hoy en día, si quieres comprar tableros curvados para introducir en tu diseño de interiores, mejorar la apariencia de tus muebles o por cualquier razón, es tan fácil como acceder a profesionales que sepan cómo tratar la madera.
¿Por qué es difícil doblar madera?
La madera es un material ortótropo. Esto quiere decir que está formada por distintas capas, que se pueden notar cuando esta es cortada. Son los anillos del tronco de madera, los que hacen que este material tenga estas características. Es esta misma forma lo que hace que la madera sea débil ante ciertos tipos de fuerza, dependiendo de la dirección en que se aplique.
El proceso de doblar madera no es difícil. Es algo que ya hemos estudiado y que, por supuesto, ya sabemos cómo funciona. Aun así, toma un poco de tiempo darle la forma que queremos, debido a la estructura molecular del material.
¿Qué tipo de madera se puede doblar?
Como has visto, la madera tiene una estructura particular. Esto hace que su proceso de mecanizado también varíe según el tipo de madera que se vaya a tratar. Al mismo tiempo, existen derivados de la madera, como el MDF, que son fácilmente manejables.
Sin embargo, maderas de calidad, como el roble, requieren de un proceso de mecanizado un poco más complejo, sino más bien difícil. Conocer todas estas técnicas para doblar madera te va a permitir saber cuándo usar cada una, dependiendo de la dureza, calidad y fiabilidad del material que estés usando.
Entonces, respondiendo la pregunta: todas las maderas se pueden doblar. Sin embargo, debido a la composición interna de cada una de ellas, van a responder de forma diferente a las técnicas que existen para lograr este efecto. A continuación, te hablamos un poco más acerca de ellas.
Técnicas más usadas para doblar madera
A lo largo de la historia, han existido todo tipo de técnicas para trabajar los materiales. Inventamos la fundición para tratar los metales y moldearlos a nuestro antojo, pero cuando trabajamos la madera, nos dimos cuenta de que la única manera era darle forma a través del corte. Sin embargo, los milagros de la ingeniería actual han permitido crear 3 técnicas para doblar la madera.
Usando vapor
Para las maderas más blandas y finas, en donde no se requiere un proceso industrial tan riguroso, se puede aplicar la flexión a vapor. Consiste en aplicar constante agua vaporizada, a presión, sobre la superficie de la madera, con la finalidad de debilitar su estructura.
La técnica humedece por completo la pieza de madera, en un proceso que puede tardar hasta una hora. Luego, se introduce el tablero en un molde, y se deja reposar hasta que se seque.
Usando chapas
Cuando el tablero de madera es tan fino que podemos considerarlo una chapa, se utiliza este procedimiento. En estos casos, no vas a necesitar ningún agente externo que facilite el proceso de mecanizado, porque la chapa se dobla fácilmente.
Lo único que se debe hacer es adaptar la chapa al molde, usando pegamento, y en un tiempo de entre 2 o 3 horas serás capaz de doblar la madera sin que esta vuelva a su estructura original.
Cortando ranuras
El último de los métodos de los que te hablaremos, técnicamente no debilita la estructura de los tableros, pero funciona como una alternativa para doblar madera. Si no cuentas con una forma de producir suficiente vapor, pero necesitas curvar un tablero lo suficientemente grueso, entonces vas a necesitar emplear la técnica de las ranuras.
Consiste, básicamente, en crear una chapa a partir de las zonas que necesitas doblar. Mientras que el grosor se mantiene en todo el tablero, haces canales paralelos en la madera, que permitan que su estructura se debilite.
Entonces, con cualquier tipo de pega o pasta, rellenas las ranuras que generaste, introduces la madera en un molde, y al cabo de cierto tiempo, tendrías tu pieza perfectamente doblada. Este no logra resultados muy profesionales, pero cuando faltan las herramientas, hay que idear nuevos métodos.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!